Autoras/es: El Monitor de Educación Común
El Monitor de Educación Común fue durante décadas el órgano
informativo del Consejo Nacional de Educación.
Le proponemos leer algunos fragmentos de un número de julio de 1940, que señala los
propósitos que la escuela debía cumplir en relación con los intereses de la
Nación:
(Fecha original del artículo: Julio 1940)
“En nuestro país en razón de
nuestro cosmopolitismo, el patriotismo debe inculcarlo Ia escuela más que el
hogar.
(...) Los programas que el Consejo ha aprobado y puesto en vigencia responden a Ia orientación nacionalista de Ia enseñanza y todas sus asignaturas están pletóricas de temas, direcciones y sugestiones para su mejor aplicacion, continuando Ia sana orientación nacionalista que contenían los programas sancionados en 1910 bajo Ia presidencia del Dr. José Maria Ramos Mejia, pero (...) es (...) esencial imbuir en el alma de los maestros llamados a impartirla el espíritu que debe animarlos en su tarea.
(...) Y si bien los maestros argentinos trabajan con fe inquebrantable y elevado sentimiento de patria y de civismo, es necesario que las autoridades les fortalezcan esa fe, (...) porque Ia enseñanza es una acción de sugestión, de creación en otras almas, de los conceptos que tenemos en nuestro interior. El Consejo debe entonces incitar al magisterio a intensificar su acción docente en una campana ininterrumpida de actividades conducentes a reavivar y fortalecer el sentimiento de nacionalidad, a robustecer el amor a Ia Patria y a sus Instituciones, para formar ciudadanos capaces de sostener y defender los altos ideales de Ia soberanía nacional (...). Los maestros deben proponerse este resultado como primordial y principalísimo en su labor de todos los días (...). La escuela argentina debe crear el espíritu. Otros organismos se preocuparán de asegurar Ia fuerza.(…)”
Citado en Escudé Carlos, El fracaso del proyecto argentino. Educación de ideología, Buenos Aires, Tesis, 1990, págs 139 y 140
(...) Los programas que el Consejo ha aprobado y puesto en vigencia responden a Ia orientación nacionalista de Ia enseñanza y todas sus asignaturas están pletóricas de temas, direcciones y sugestiones para su mejor aplicacion, continuando Ia sana orientación nacionalista que contenían los programas sancionados en 1910 bajo Ia presidencia del Dr. José Maria Ramos Mejia, pero (...) es (...) esencial imbuir en el alma de los maestros llamados a impartirla el espíritu que debe animarlos en su tarea.
(...) Y si bien los maestros argentinos trabajan con fe inquebrantable y elevado sentimiento de patria y de civismo, es necesario que las autoridades les fortalezcan esa fe, (...) porque Ia enseñanza es una acción de sugestión, de creación en otras almas, de los conceptos que tenemos en nuestro interior. El Consejo debe entonces incitar al magisterio a intensificar su acción docente en una campana ininterrumpida de actividades conducentes a reavivar y fortalecer el sentimiento de nacionalidad, a robustecer el amor a Ia Patria y a sus Instituciones, para formar ciudadanos capaces de sostener y defender los altos ideales de Ia soberanía nacional (...). Los maestros deben proponerse este resultado como primordial y principalísimo en su labor de todos los días (...). La escuela argentina debe crear el espíritu. Otros organismos se preocuparán de asegurar Ia fuerza.(…)”
Citado en Escudé Carlos, El fracaso del proyecto argentino. Educación de ideología, Buenos Aires, Tesis, 1990, págs 139 y 140
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