Estaremos
junto a César Antillanca a las 19 hs en el auditorio del Hotel Bauen
para dar visibilidad al caso de Julián. Además nos acompañaran
familiares de otros casos patagónicos, y exhibiremos un video realizado
por estudiantes de Trelew sobre el caso Antillanca.
Julián
Antillanca, 19 años, fue detenido, torturado y asesinado por policías de
la comisaria 4ta de Trelew. A fuerza de lucha los policías fueron
llevados a juicio, donde fueron absueltos.
La tortura y el gatillo fácil son política de Estado
CORREPI - Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional
Caso Antillanca: Conferencia de prensa en el Bauen
En la madrugada del 5 de septiembre de 2010, Gonzalo Julián Antillanca,
de 19 años, fue abordado por cuatro policías uniformados de la ciudad
de Trelew que lo golpearon en todo el cuerpo. Las graves lesiones
producidas en la cabeza y cuello causaron un paro nervioso central, y
Julián murió en el momento. Los policías cargaron el cuerpo en el
patrullero y lo tiraron en una calle oscura. Desde el hallazgo del
cuerpo, César Antillanca, papá de Julián, encaró una activa lucha contra
la versión oficial, que comenzó hablando de coma etílico y siguió con
“muerte natural por causas indeterminadas”, hasta que logró encontrar
testigos que vieron la detención y la paliza, y hasta el momento en que,
desde el baúl del patrullero, arrojaron el cuerpo sin vida en la cinta
asfáltica.También se pudo determinar que los mismos policías, horas
antes, habían torturado a otros dos chicos, los hermanos Sergio y Denis
Aballay, y ambas causas se acumularon. A fuerza de militancia y
denuncia constante, con pruebas contundentes como el ADN de Julián
encontrado en el patrullero, nueve meses después los cuatro policías,
Martín Paul Solís, Jorge Abraham, Pablo Morales y Laura Soledad Córdoba
fueron llevados a juicio.Los jueces, cumpliendo su tarea de preservar el
aparato represivo estatal, optaron por el “mal menor”, y se limitaron a
condenar a los policías a penas escandalosamente leves por las torturas
a los hermanos Aballay, y los absolvieron por la tortura seguida de
muerte de Julián Antillanca.Frente a la sentencia, que confirma que el
gatillo fácil y la tortura es una política de estado, ejecutada por las
fuerzas de seguridad, y legitimada por el aparto judicial, la familia
Antillanca y la fiscalía interpusieron un recurso extraordinario que
todavía no ha sido resuelto.El papá de Julián, consciente de que no es
un policía, es toda la institución, y convencido de la necesidad de
organizarnos contra la represión estatal, viene coordinando actividades
con CORREPI, en el marco del ENA (Encuentro Nacional Antirrepresivo)
desde el primer momento. Hemos compartido muchas jornadas de lucha,
tanto en la Patagonia como en Buenos Aires y el conurbano, mostrando
que, en Trelew o en La Matanza, los trabajadores y sus hijos son
víctimas de una misma política de disciplinamiento y exterminio.Por eso,
este 21 de septiembre, en el auditorio del Hotel Bauen, recuperado por
sus trabajadores, estamos convocando conjuntamente una conferencia de
prensa para dar visibilidad nacional al caso, uno más de los centenares
similares en la provincia de Chubut y la vecina Río Negro. Junto a
César, estarán con nosotros familiares de otros casos patagónicos, y
exhibiremos un video realizado por estudiantes de Trelew sobre el caso
Antillanca.Julián, uno más en la lista de 3.500 personas asesinadas por
el aparato represivo estatal, representa a cada uno de esos jóvenes
asesinados por el gatillo fácil y la tortura, una política de estado que
busca, a través del temor, ejercer el control social obre los jóvenes
de los barrios, otencialmente destinados a pelear por otro tipo de
sociedad.Convocamos a todos los medios y organizaciones a acompañarnos
en la conferencia de prensa el viernes 21 de septiembre, donde, junto a
César Antillanca y otos familiares de víctimas del gatillo fácil y la
tortura, daremos otro paso en la lucha contra la represión estatal.
En Boletín Informativo n°672 de CORREPI
No hay comentarios:
Publicar un comentario