Autoras/es: Maria Mercedes Rementeria
(Fecha original del artículo: Febrero 2012)
Uno de los ámbitos más importantes para su difusión son las escuelas primarias ya que se considera que los niños y niñas constituyen la franja etaria más receptiva de este tipo de mensajes y a la vez son retransmisores al núcleo de su familia.
En la primera parte de la exposición se consignaron las tres primeras claves y en esta segunda parte se abordarán las dos restantes. Previo a eso se hará un repaso por las primeras para recordarlas.
Las claves:
1° Utilizar agua y alimentos seguros para su consumo:
El agua segura es la que ha pasado por un proceso de purificación que la hace apta para el consumo humano (para beber y preparar alimentos).
Un alimento no es seguro cuando su color, olor, textura o sabor están alterados. Es aconsejable que cuando se elijan alimentos estos sean frescos, no hayan pasado su fecha de vencimiento o que si vienen en lata que ésta no presente abolladuras. Asimismo hay que lavar bien los alimentos que se van a consumir crudos.
2° Practicar la limpieza:
Las personas, los lugares y los utensilios con los que vamos a cocinar y comer deben estar bien limpios.
Las personas deben practicar el lavado de manos cuando manipulan alimentos. La cocina y los elementos culinarios necesitan ser lavados y desinfectados para evitar que en sus superficies se alojen gérmenes.
3° Separar carnes, pollo y pescado crudos del resto de alimentos
Las carnes rojas y blancas contienen bacterias que pueden ser transportadas a otros alimentos si no se toman los recaudos necesarios. Lo importante es no tocar alimentos que se van a consumir crudos luego de haber tocado carne y usar distintos recipientes y tablas para preparar carnes y verduras o frutas.
4° Cocinar los alimentos completamente
Cocinar correctamente los alimentos asegura que los microbios que ellos se encuentran, mueran. Hay que prestar especial atención a la cocción de la carne que si está mal cocida puede llegar a provocar el Síndrome Urémico hemolítico (SUH) una de las enfermedades transmitidas por alimentos más comunes entre los niños pequeños de nuestro país.
A la hora de cocinar hay que tener presente que:
• Las carnes, el pollo y el pescado tienen que cocinarse hasta que estén bien calientes y no tengan color rosado en el centro. Las carnes contienen una gran cantidad de bacterias por eso es importante que se cocine completamente tanto el exterior como el interior de este tipo de alimentos.
• Las sopas y guisos tienen que llegar a punto de hervor y mantenerse hirviendo durante cinco minutos.
• El huevo tiene que cocinarse hasta que la clara como la yema estén bien cocidas.
• Si se va a recalentar comida hay que hacerlo hasta que esté bien caliente o hirviendo, por lo menos durante cinco minutos.
5° mantener los alimentos a temperaturas seguras
Mientras más tiempo los alimentos se mantienen a temperatura ambiente más crece el riesgo que se desarrollen en ellos gérmenes. Lo ideal es mantenerlos bien fríos o bien calientes para evitar la reproducción de microorganismos peligrosos.
¿Cómo conservar los alimentos a temperaturas seguras?
• No dejar alimentos cocidos ni perecederos a temperatura ambiente más de dos horas. Lo aconsejable es guardarlos en la heladera.
•La heladera no debe estar demasiado llena para no dificultar la circulación del aire frío.
•Hay que limpiar y descongelar la heladera y el freezer con frecuencia.
• No dejar abierta la puerta de la heladera durante mucho tiempo para no alterar la temperatura de su interior.
•Los alimentos pueden deteriorarse aún estando en la heladera o el freezer, por lo que es recomendable poner la fecha de preparación de las sobras para saber cuánto tiempo hace que están guardadas.
• Hervir la comida antes de servirla.
•Enfriar y guardar las sobras rápidamente.
•Lo aconsejable es no cocinar en exceso sino calcular lo que cree se va a comer durante el día.
•En caso no tener un refrigerador o freezer es preferible comprar los alimentos frescos (como las carnes y queso) y utilizarlos inmediatamente.
• No guardar la comida durante mucho tiempo. Se aconseja comer los alimentos dentro de los 2 ó 3 días desde su preparación.
• Los alimentos congelados no deben descongelarse a temperatura ambiente sino en la parte baja de la heladera.
Los alimentos que hay que mantener a temperaturas frías son las carnes crudas, pescados y mariscos crudos, quesos, leche, crema, manteca y mayonesa
Cuando se van a consumir las comidas ya cocidas hay que calentarlas bien, especialmente las comidas preparadas de carnes, pollo o pescado y caldos.
A modo de conclusión:
A lo largo de este artículo se conocieron las claves para evitar que los alimentos que se consumen diariamente transmitan enfermedades. Son claves simples que pretenden llegar a toda la comunidad, incluidos los niños. Por este motivo es que la OPS valora su tratamiento en las escuelas primarias.
Los niños son la parte de la población más predispuesta a incorporar nuevos hábitos y a la vez representan la franja etaria más vulnerable a la hora de contraer una ETA. Por estos dos motivos es importante que ellos conozcan estos temas.
Además enseñarle las claves de la alimentación segura a los niños asegura que ellos retransmitan el mensaje en sus casas y sus familias también incorporen prácticas más saludables.
Fuente: Manual “LAS 5 CLAVES PARA MANTENER LOS ALIMENTOS SEGUROS” INCAP/OPS/OMS
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