Reafirmamos nuestros
derechos soberanos sobre las mismas, del mismo modo que repudiamos que
recientemente los piratas ingleses hayan pretendido denominar a parte
del territorio de la Antártida bajo soberanía Argentina con el nombre de
Reina Isabel.
La causa Malvinas ha
concitado desde siempre la solidaridad de nuestros hermanos
latinoamericanos y de la inmensa mayoría de los pueblos y países del
mundo ante esta afrenta colonialista, alentada y sostenida por el
imperialismo yanqui y por el conjunto de los gobiernos capitalistas de
la Unión Europea.
Tal ha sido la solidaridad
recibida que en 1982 varios países de nuestro continente estuvieron a
disposición para combatir conjuntamente al agresor inglés, como fueron
los casos de Cuba y Perú, entre otros. En ese camino hace un año atrás
se ha resuelto la negativa a que los buques con la bandera de las islas
atraquen en los puertos de los países del MERCOSUR.
Contrastando ésta actitud
con la posición que el gendarme mundial de los pueblos -amo mayor de los
ingleses- tuvo en el conflicto bélico de 1982, apoyando con logística y
un submarino nuclear al Reino Unido. Quién por otra parte era aliado
fundamental de la dictadura militar genocida argentina.
La maniobra para recuperar
Las Malvinas encarada por la dictadura militar, no tuvo otro fin que
perpetuarse en el poder; ya que estaba siendo jaqueada por el pueblo y
los trabajadores argentinos.
Como siempre los
imperialistas y colonialistas ingleses nos faltan el respeto aludiendo a
la “autodeterminación” de la población malvinera, que fuera implantada
desde la época de la usurpación, y se niegan rotundamente a discutir la
soberanía de las islas.
El reclamo en los foros
internacionales de la presidenta argentina, Cristina Fernández y sus
funcionarios así como la nueva misiva enviada en el día de hoy al primer
ministro inglés, es sin duda justo, pero de escasa eficacia,
En nuestro país las
compañías inglesas conservan, y agrandan su patrimonio, su capital y
sus privilegios. Sólo llevando adelante medidas contra esos intereses
económicos – como serían la expropiación de sus empresas- podremos
lograr que las Malvinas nos sean definitivamente restituidas.
Una política nacional
coherente con una política internacional anticolonialista y
antiimperialista no debería permitir la expoliación de nuestras riquezas
naturales, como por ejemplo está sucediendo hoy en nuestro país, tanto
en los mares del sur como en el conjunto del territorio nacional.
Al mismo tiempo,
condenamos que para tener un lugar de segunda en el G-20, hegemonizado
por los imperialistas de todo pelaje -incluido el Reino Unido de Gran
Bretaña-; el gobierno nacional haya sancionado la Ley Antiterrorista
que, como la historia del capitalismo indica, sólo será aplicada contra
los verdaderos patriotas y los luchadores populares. También condenamos
que a pesar de la retórica anti colonialista del gobierno seguimos
ostentando el status de Aliado extra OTAN.
Las organizaciones
políticas firmantes, ratificamos que las Islas Malvinas forman parte
indisoluble de nuestro territorio, y que el camino de la unidad
latinoamericana con posiciones firmes es el correcto para desterrar
definitivamente el colonialismo de nuestro continente, tanto en Malvinas
como Puerto Rico, Guantánamo, Guadalupe, Guyana francesa, Martinica, y
los territorios de la Antártica que usufructúan las potencias del Primer
Mundo.
Es por todo esto que
seguiremos adelante con el grito de ¡¡¡Fuera ingleses de Malvinas!!! y
exigimos al gobierno argentino una posición realmente firme para lograr
que las Malvinas, Sandwichs e Islas del Sur se reintegren a nuestro
territorio. En tanto promoveremos encuentros y acciones con todo el
campo popular y antiimperialista de nuestro país y América Latina.
¡¡¡¡ Fuera ingleses de Malvinas y yanquis de América Latina!!!!!
¡¡¡Gloria eterna a los colimbas de Malvinas!!!
Agrupación Domingo
Menna, Agrupación Kiki Lezcano, Casa del Trabajador Agustín Tosco,
Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social.
Argentina, 3 de Enero de 2013
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